Conforme se acerca el término del embarazo, a la mujer le surgen dudas acerca de cómo será el parto: si por vía vaginal o por cesárea. La información que el médico le proporcione le permite formarse una idea más clara de cuándo y cómo es posible el parto y cuándo se requiere la cesárea. En el primer artículo de este número de Ginecología y Obstetricia de México un grupo de psicólogas se dio a la tarea de investigar si existe relación entre el tipo de parto o la cesárea y el estado emocional de la mujer durante el puerperio. Se comprueba, una vez más, que la información previa a cualquier suceso o procedimiento médico es un factor decisivo para disminuir los estados de estrés y angustia que suelen ser comunes cuando se enfrenta una situación desconocida.

En la toma de la citología cervical se han utilizado diversos aditamentos (abate-lenguas, hisopos, espátulas, brochas y cepillos) para disminuir la cantidad de resultados falsos negativos y la necesidad de exfoliar mayor cantidad de células epiteliales de la unión escamocolumnar y del endocérvix. Aquí se presentan los resultados de un estudio que tuvo como propósito comparar la calidad de la citología cervical tomada con Cervex-brush o con Cervex-mex. Éste último es un aditamento, diseñado por los autores, de dos escuadras que pueden ajustarse manualmente a las características del cuello uterino.

El perfeccionamiento de las técnicas quirúrgicas, la innovación y el desarrollo tecnológico, así como los adelantos en su conocimiento han aumentado la frecuencia de la operación cesárea. Para la Organización Mundial de la Salud, las cesáreas no deben rebasar el 15%; sin embargo, la frecuencia de cesáreas reportada en las instituciones de salud de México llega, incluso, a cifras del 49%. Al incremento de estas cifras han contribuido muchos factores, no sólo el perfeccionamiento de las técnicas. ¿Está justificado que cada día se practiquen más cesáreas? ¿Es mayor el beneficio que el costo que implica este tipo de operaciones? Aquí se publican los resultados de una investigación original que tuvo como objetivo identificar factores de riesgo sociodemográficos, obstétricos, de atención y práctica médica relacionados con la operación cesárea.

El bajo peso de los neonatos es un reto médico por las repercusiones en la salud del niño. En la actualidad se siguen estudiando las causas y los factores de riesgo para bajo peso del recién nacido pretérmino. Uno de éstos es la preeclampsia. En los resultados de un estudio que aquí se reporta se encontró que influyó en el bajo peso y se relacionó con trombocitopenia.

Hace 55 años, en las páginas de Ginecología y Obstetricia de México el profesor Alberto Peralta Ramos ya discutía las decisiones del obstetra en torno al derecho al aborto terapéutico, en referencia exclusiva a las repercusiones derivadas de infecciones virales para las que se argumentaba que. “La rubéola, como enfermedad intercurrente del embarazo… plantea hoy en día la necesidad de la interrupción sistemática de la gestación, no obstante que la enfermedad no influya sobre la salud y la vida de la madre. Se arguye que la razón no es precisamente de orden médico sino de profiláctica eugénica, es decir, vinculada a la procreación sana y tendiente a evitar el nacimiento de seres anormales con malformaciones congénitas y graves defectos que malogran la vida individual como cantidad positiva para la familia, la sociedad, el Estado y la raza.” Este tema sigue siendo motivo de controversia. Hay defectos que son curables, como las cataratas y las anomalías cardiovasculares, que no justifican privar la vida de un embrión o un feto.

Dr. Jorge Delgado Urdapilleta