Resumen

La cercanía de nuestra sociedad al encuentro del siglo XXI, paradójicamente se está aproximando a un nivel de progreso tecnológico y biomédico casi cercano a lo ideal. Parecería que todo estuviera preparado para atender y ofrecer la mejor calidad asistencial en el terreno de la salud. Sin embargo, esos acontecimientos no han evolucionando paralelamente con el nivel educativo-cultural-médico de nuestra población, componente esencial para la participación apropiada del profesionista. La presentación de los trabajos aquí analizados, nos lleva a reflexionar en que debemos aceptar la idea de que el objetivo primordial de la medicina debe ser la salud y no solamente la enfermedad; concretamente, en los últimos años para entender los problemas degenerativos y su complejidad, el campo de la biología celular y la bioquímica, han favorecido que la ganancia de esos conocimientos matice conceptos aparentemente establecidos y que constantemente necesitan alcances más profundos para aplicar estrategias no sólo en el diseño de su estudio sino en la terapéutica empleada. Un gran numero de investigaciones clínico-epidemiológicas dan la pauta y señalan que hacia la edad de los 50 años aparece una tendencia significativa de un buen número de enfermedades crónicodegenerativas, por lo que la demanda de medios diagnósticos, medidas de prevención y nuevas y/o diferentes regímenes nutricionales, ambientales y médicos concertan un compromiso sine quanon, por esas circunstancias de la evolución humana en las que es indispensable entender la fenomenología de dicho proceso para compensar lo que fisiológicamente se deteriora. Es claro que, una de las preocupaciones en relación con el futuro de la condición de salud es la calidad de vida en esos años posteriores, es decir, cuando se inicia el establecimiento del proceso degenerativo celular. Los dos siguientes apartados tienen la intención de asociar varios niveles del conocimiento actual de un problema de Salud Pública en la mujer

Abstract

It is well conceived that the intention of man in trying to solve human kind ailments, is being a long standing biological rule to give rational solutions at any rate. The response to the current problem studied, approaches a different view of the peripheral and local deteriorating phenomena and offers--in a non classical way-how to maintain the well-being of a population of otherwise healthy women, in trying to defer the degenerative cellular process. Interesting, as the proximity of the XXI century arrives, the technology and the biomedical level of progress seems to be for a way from the ideal, particularly when dealing with a process initiated years before the menopause. This critical period of hormonal imbalance makes also a definite e social change for women; such a combination of facts, prompt us to be aware that in society, a women is no longer biologically reproductive but certainly, productive, as an economical drive digure. Needless to say that we must be protective to her and to realize that the number of them will continue to an increase in the years to come. The following two comments intended to associate various levels of the current knowledge of one of the Public Health problems in women.