ISNN - 0300-9041
ISSNe - 2594-2034
Indizada en: PubMed, SciELO, Índice Médico Latinoamericano, LILACS, Medline
EDITADA POR LA Federación Mexicana de Colegios de Obstetricia, y Ginecología A.C.
FUNDADA POR LA ASOCIACIÓN MEXICANA DE GINECOLOGÍA Y OBSTETRICIA EN 1945
INFORMACIÓN EXCLUSIVA PARA LOS PROFESIONALES DE LA SALUD
Periodicidad: mensual
Editor: José Niz Ramos
Coeditor: Juan Carlos Barros Delgadillo
Abreviatura: Ginecol Obstet Mex
ISSN: 0300-9041
ISSNe: 2594-2034
Indizada en: PubMed, SciELO, Índice Médico Latinoamericano, LILACS, Medline.
(6 de junio de 1920 - 29 de mayo de 2003)
TODOS TENEMOS UN SILENCIO
Todos guardamos un silencio. El pobre, el humilde, el prepotente, el rico, el ambicioso, el mentiroso o el justo. Es ese silencio el que nos permite abrir el cofre de la meditación, para expresar:
Amigo, aquí estoy en los momentos felices y en los momentos difíciles. Aquí estoy para compartir tu risa y tu llanto.
A todos ustedes, familiares y amigos de nuestro querido amigo Carlos Espinosa, quiero expresarles que la muerte física, es La coronación de todas nuestras expectativas que tenemos en esta vida. Pero además, para expresarles que la muerte no existe, porque se continúa con el milagro maravilloso de la vida, que se continúa en nuestros hijos.
Hace algunos años, cuando todas las organizaciones médicas le rendimos un homenaje al mérito médico al Dr. Carlos Espinosa Flores, sentimos que era uno más de nuestros representantes simbólicos y asistimos a un banquete espiritual donde expresamos: Estamos desposeídos de nuestros egoísmos y torpezas de la vida y reconocer a un hombre que con esa trayectoria jovial y optimista nos contagiaba.
Aquel hombre impulsor y fundador de una Cruz Roja Mexicana de nuestra ciudad, del Colegio Médico de Monclova y de su querida novia, la Sociedad de Ginecología y Obstetricia.
¡Cómo no rendirle un homenaje al mérito médico, al hombre que no se expresaba mal de ningún compañero médico!
Al hombre que conservaba la ecuanimidad y con una grandeza de espíritu contagiaba a todos los amigos. Su carácter polifacético abría un abanico donde estaba el hombre pecador, el bohemio, el profesionista y el padre. Ese padre orgulloso de sus hijos, y con el que en una ocasión lloramos juntos, cuando sintió el impacto de la muerte de su querido hijo Carlos. Son lecciones que Dios nos da y que muchas veces no comprendemos.
El carácter sonriente y contagioso nos hacía sentir su expresividad para decirnos: voy a sonreír con alguien. Voy a realizar un inesperado acto de bondad con alguien, aunque no lo conozca. Hoy daré apoyo a alguien que se sienta deprimido.
Les diré a todos los niños que vi nacer, de ese nido portentoso, de sus madres, cuán especiales son y le diré a Dios: Gracias, por permitirme ver este majestuoso milagro de la vida.